martes, 16 de julio de 2013

Kaminaljuyú

    Sitio arqueológico de la Sierra Madre del Sur, situado en las inmediaciones de la ciudad de Guatemala.
    Kaminaljuyú era un centro importante a comienzos de la era cristiana, mientras que el denominado Período Clásico Maya no se inicia hasta el siglo III según la mayoría de los arqueólogos. Además, las ciudades clásicas se encuentran casi todas al Norte de la Sierra, en las selvas del Petén, contándose la guatemalteca Kaminaljuyú y la hondureña Copán entre las pocas excepciones notables.
    Kaminaljuyú, después de haber florecido varios siglos antes de JC, tuvo un renacimiento cultural bajo la influencia de Teotihuacán, y sus templos presentan fachadas siguiendo el modelo mejicano del talud-tablero. Esto pudo ocurrir, según Nigel Davis, a partir del año 400, aunque la cronología no está firmemente establecida. Sanders y Price creen que en Kaminaljuyú se instaló una verdadera colonia de teotihuacanos, tanto artesanos como guerreros, pero Davies no descarta que la influencia se debiera a simples relaciones comerciales, las cuales llegaban en todo caso hasta Copán, donde se han descubierto residuos de cerámica anaranjada de tipo teotihuacano.
    Davies dice: A pesar de lo notorio del influjo teotihuacano en las selvas del Norte de Guatemala, palidece ante la intensidad de su presencia en el sitio de Kaminaljuyú, ahora en gran parte cubierto por un suburbio moderno de la ciudad de Guatemala... Los paralelos entre Kaminaljuyú y Teotihuacán son tan notorios que el arqueólogo Kidder llegó a sugerir que la primera era una colonia de la segunda. El típico patrón talud-tablero está presente en todos los templos de Kaminaljuyú. El sitio tuvo una larga historia. Hacia el 500 antes de Cristo, mucho antes de que Teotihuacán llegara a su apogeo, ya había alcanzado su extensión máxima. Sólo mucho más tarde, hacia el 400 de Cristo, se dejó sentir la influencia de Teotihuacán; pero la exactitud con que se reprodujeron sus formas sugiere que fueron llevadas directamente desde su lugar de origen. En este período, que se conoce como la fase Esperanza, Kaminaljuyú disfrutó de un renacimiento cultural como réplica de Teotihuacán, con su escultura, arquitectura y murales de Tlaloc característicos. Tan extraordinarios paralelos han llevado a pensar que Kaminaljuyú era una base militar de primera importancia para Teotihuacán, cuya finalidad era controlar las ricas tierras bajas de la costa del Pacífico. Sin embargo, la evidencia con que se cuenta para apoyar esta teoría no es concluyente. Hay semejanzas no explicadas entre los dos centros, pero las diferencias son tan marcadas por otro lado que ponen en duda la situación colonial de Kaminaljuyú. Por ejemplo, las figurillas de barro cocido, las máscaras de piedra y los braseros del dios del fuego, rasgos muy típicos de la cultura teotihuacana, no se encuentran en el sitio guatemalteco. Kaminaljuyú está lejos de ser una avanzada aislada; también se encuentran influencias teotihuacanas en la región oajaqueña, a poco menos de la mitad del camino entre Kaminaljuyú y la metrópoli. Se localizan principalmente en el gran centro de Monte Albán, aunque la proporción de objetos de tipo teotihuacano encontrados allí es pequeña si se compara con la de la ciudad guatemalteca. Así, aunque tenga rasgos teotihuacanos, Monte Albán creó desde sus primeros tiempos un estilo característico propio. La civilización de los zapotecas, y la de los mixtecas que después los desplazarían, ocupa un lugar único en el pasado precolombino...